ESCUELA TEATRO Y MICROTEATRO

NECESIDADES

El proyecto Riverside describe el proceso de puesta en escena de un edificio ecléctico de estilo histórico. En particular, una puesta en escena de Palm Springs donde arquitectos y benefactores construyeron su propio escenario, su interpretación de la belleza y el lujo. Un océano en el desierto.

Como ellos, se ha reinterpretado el concepto que en un edificio catalogado. Y, en esos términos, se diseña un espacio de entretenimiento tratando de romper con las convenciones para atraer a un público sin pretensiones y amante de la cultura.

Como el objetivo es trasmitir conceptos como playa y diversión, se utilizan tonalidades desenfadadas en cada espacio. Todos los elementos y la paleta cromática se regirán por tonos vibrantes y saturados, conviviendo piezas actuales y llamativas con los elementos que ya se encuentran en el edificio.

Las diferentes texturas, colores y estampados convivirán en este rincón cultural, que se ha convertido en un escenario de película. El resultado ha sido que el cliente / alumno es uno más dentro del espectáculo al que va a asistir. Buscando fascinación desde el primer momento.

EL ORDEN. UN PUNTO DE REFLEXIÓN IMPORTANTE.

El orden y que cada cosa esté en su sitio es realmente importante para poder disfrutar de armonía y calma. El caos de tu casa termina repercutiendo en tu estado de ánimo.

Como aficionado a las bicis clásicas le encanta tenerlas expuestas y observarlas como si de un trofeo se tratase. Tiene piezas por todas partes porque, en sus ratos libres, le encanta arreglarlas.

Lo teníamos muy claro, una de sus bicicletas tenía que ser la pieza central del cuarto. Colocada a favor de la luz, justo enfrentada a la ventana, potencia, mas aún, su presencia.

También era importante guardar parte de las piezas para que no estuviesen expuestas al polvo. Para ello escogí unos baúles clásicos de madera para que fuese a la par con la bicicleta. El objetivo era incluir elementos originales, nada nuevo. Con la esencia de un objeto con vida.

Al ser un vestidor, era indudable la necesidad de tener un espacio donde dejar preparada la ropa el día anterior. En una tienda de antigüedades encontré un hermoso galán de noche de nogal que enseguida me recordó a Javier. Sin excesos. Además incluí una desclazadora, a juego con el galán de noche, que Javier usa a diario y le resulta de lo más cómoda.